jueves, 5 de julio de 2007

Cargando mis cruces
Doliéndome entre esperanzas,
Solo risas escucha mi estómago
Y mis oídos ya están sordos de gritar.
Agujas asechan las madrugadas
Las manzanas vuelan entre naranjas,
Y entre cielos de angustias y sinsabores aun gravita esta alma apasionada
Que se encuentra como en penumbras por purgar.
El instinto avisa que hay ilusiones por aflorar
Sientes caricias allá lejos, muy lejos
Cada vez más lejos…
Aun sabiendo que te pertenece, aun sabiendo que es tuyo
La alegría se opaca entre viajes por hacer…
Y entre lunas y estrellas figuras su alma
Acaricias las nubes entre sollozos
Y caminas con sonrisas de recuerdos
Con alegrías que anhela un corazón adorado.
Cruzan ideas por las cabezas,
Callas en silencios eternos palabras cortas
Palabras que jamás serán,
Ideas perturbadoras cargan las cruces de los días tristes
Solo te refugias en ilusorios caprichos,
Piensas que sin atragantarte todo estará mejor
Piensas que el escaparse de ti mismo es la solución
Te crees fuerte al no dejarte ahogar…
Entre caricias de sábanas heladas sientes un alma atorada
Entre calmas quiméricas entierras la razón,
Porque solo especulas con el corazón.
Y aunque entre hojas y miradas inquisitorias te exasperes con el alma
Queda la venidera felicidad añorada,
Entre amorosos susurros con deslizables y mojados besos de un nuevo y eterno futuro.
Eras pura y bella
Y entre soplos algo te llevo el alma
Eras casta y preciada por mis días,
Pero al menos un atisbo de tu ser se queda en mis recuerdos
Dulce dama apagada.
Criando días entre remolinos acabas
Te extasías en tu nueva casa
Más allá de mis ojos penumbrosos,
Entre visiones más tenebrosas
Y entre apuestas en

el acalorado mundo de las llamas.
Fuiste como un ser,
Acabaste como una dama sin pasado
Sin recuerdos sin dolores
Sólo sabores de algo que pudo ser.
Cristalizas momentos en una retina ya esfumada
Y entre caricias de alguien fantasmal
Haces risas y trizas de tu ser.
Caíste y nadie te ayudó
Entre manos resbalosas jamás lograrías abandonar tu pesar.
Dulce alelí de los recuerdos
Apagaste una luz
Pero ya no hay retorno
Y entre deslices,
Rostros camuflando amargura
Pesar y reproche,
Sólo una vida
Vida extirpada de la redonda cúpula aireada.

martes, 3 de julio de 2007

PREÁMBULO A UN SILENCIO

Porque se tiene conciencia de la inutilidad de tantas cosas a veces uno se sienta tranquilamente a la sombra de un árbol en veranoy se calla.(?) ¿Dije tranquilamente? falso, falso:uno se sienta inquieto, haciendo extraños gestos,pisoteando las hojas abatidaspor la furia de un otoño sombrío,destrozando con los dedos el cartón inocente de una caja de fósforos,mordiendo injustamente las uñas de esos dedos,escupiendo en los charcos invernales,golpeando con el puño cerrado la piel rugosa de las casasque permanecen indiferentes al paso de la primaverauna primavera urbana que asoma con timidez los flecosde sus cabellos verdes allá arriba,detrás del zinc oscuro de los canalones,levemente arraigada a la materia efímera de las tejas apunto de ser de polvo.Eso es cierto, tan ciertocomo que tengo un nombre con alas celestiales,arcangélico nombre que a nada corresponde:Ángelme diceny yo me levantodisciplinado y rectocon las alas mordidas quiero decir: las uñasy sonrío y me callo porque, en último extremo,uno tiene concienciade la inutilidad de todas las cosas.

domingo, 1 de julio de 2007

almas sin paraíso (ANABANTHA)

Quiero estar en un lugar, entre hibridas flores y respirar; montañas de niebla nos refugiaran los cantos ya viejos nunca nos encontraran. Hay perfumes que sueñan tu piel empapar en toda tu sangre poder rencarnar el silencio me atrapa, quiero continuar perdido en el bosque junto, tu alma y la paz. Al ver pasar a la luna se abren los cielos llueven estrellas, deseo sentir el alivio de estar dormida bajo su luz. bajo su luz... Hoy ve todo mi llanto por los caminos de libertad, asi las almas perdidas que mueren en vida, regresaran. No volveran Jamás.